Reacciones a fármacos

Autor: García Avilés C

Fragmento

Introducción La Organización Mundial de la Salud define reacción adversa a medicamentos (RAM) como «cualquier efecto perjudicial o no deseado que ocurre tras la administración de una dosis normalmente utilizada en la especie humana para la profilaxis, diagnóstico y tratamiento de una enfermedad o para la modificación de una función biológica». Las RAM se dividen en dos grandes grupos (Tabla 1): 1. Tipo A: Son reacciones predecibles, relacionadas con acciones farmacológicas del medicamento por lo que potencialemente pueden suceder en cualquier niño; se caracterizan por ser dosis dependiente y por ser reversibles tras la retirada del fármaco o la reducción de dosis. Constituyen el 80% o más de las RAM: – Sobredosis o Toxicidad: Los efectos adversos están directamente relacionados con la dosis administrada del fármaco o con su acumulación inesperada debida a alguna anomalía excretora o metabólica del paciente (p.e., insuficiencia hepática o renal). – Efectos colaterales: Este término se limita a acciones farmacológicas indeseables pero inevitables del fármaco, a dosis aconsejadas. – Efectos secundarios: Son efectos indirectos pero no inevitables de la acción primaria del fármaco. – Interacciones farmacológicas: Algunos fármacos pueden interaccionar entre sí, produciendo alteraciones en sus respectivas farmacocinéticas. 2. Tipo B: Son reacciones poco frecuentes, impredecibles y que habitualmente no están relacionadas con las acciones farmacológicas del medicamento. Por regla general, persisten en mayor o menor medida durante cierto tiempo tras suspender el fármaco o disminuir su dosis; van ligadas a factores dependientes del paciente, ya que ocurren en individuos con sensibilidad inmunológica o, en ocasiones, susceptibles por diferencias genéticas. Se definen como reacciones adversas a fármacos con base inmunológica, entre las cuales encontramos: – Intolerancia: La reacción desfavorable representa un efecto farmacológico cualititativamente normal del fármaco, el cual está cuantitativamente elevado. Una pequeña dosis del medicamento produce un excesivo efecto farmacológico del mismo. – Idiosincrasia: La reacción al fármaco es cualitativamente anormal y no corresponde con la acción farmacológica usual del mismo. Tales reacciones no dependen de un mecanismo inmunológico sino más bien de un déficit metabólico o enzimático genéticamente determinado. – Pseudoalergia: Este tipo de reacción asemeja un mecanismo inmediato tipo I pero no es una reacción mediada por IgE. Están implicadas el mismo tipo de células (mastocitos y basófilos) pero el desencadenante inicial es diferente. – Hipersensibilidad o reacción alérgica: Es el resultado de una respuesta inmune del organismo que lleva a la formación de anticuerpos específicos, linfocitos sensibilizados o ambos. En este capítulo nos centraremos prácticamente en este tipo de reacciones.

Palabras clave:

2006-11-02   |   15,125 visitas   |   2 valoraciones

Vol. 36 Núm.342. Septiembre 2006 Pags. 249-257 Ped Rur Ext 2006; 36(342)