Resultados de un estudio a largo plazo con drogas antiparasitarias en infectados chagásicos crónicos

Autores: Gallerano Rafael H., Sosa Raúl R.

Resumen

Se describen los resultados de un seguimiento longitudinal realizado durante más de 5 años en 1.203 pacientes infectados chagásicos: 535 de ellos recibieron tratamiento antiparasitario; los restantes 668 no recibieron tratamiento. Los pacientes fueron controlados, al menos una vez por semestre, mediante valoraciones clínicas, serologías cuantitativas, electrocardiograma de reposo, telerradiografías de tórax de frente y, en algunos casos, ecocardiograma bidimensional u otro estudio. En los pacientes “Tratados” con allopurinol, benznidazol o nifurtimox el tratamiento resultó eficaz para: a) negativizar parcialmente la parasitemia (aproximadamente en el 70% de los pacientes); b) reducir los valores de los títulos de la serología específica (HAI-TIF); c) negativizar las pruebas serológicas en forma persistente en pocos pacientes (5%); d) prevenir la incidencia de cardiopatía leve o de alteraciones electrocardiográficas en infectados chagásicos, especialmente en mayores de 30 años; e) prevenir la progresión de la cardiopatía en cardiópatas leves y moderados; f) disminuir la incidencia de complicaciones de la cardiopatía chagásica; g) disminuir la mortalidad general y la mortalidad atribuible en los chagásicos crónicos. Las tres drogas utilizadas tuvieron similar eficacia, con menor incidencia de efectos adversos y abandonos del tratamiento con allopurinol que con benznidazol o nifurtimox. Las diferencias con el grupo “No-tratados” fueron estadísticamente significativas para las tres. De 902 infectados sin cardiopatía durante un período de 5 años promedio se estableció una incidencia del 4,8% de manifestaciones electrocardiográficas sugestivas de miocardiopatía chagásica. Luego de un seguimiento similar de 165 chagásicos cardiópatas leves se estableció que la incidencia de progresión de la cardiopatía chagásica fue del 24,8%. Luego de finalizado el período de seguimiento se encontraron evidencias de progresi ón del daño miocárdico en 120 pacientes “No-tratados” y en 31 “Tratados” (17,9% y 5,8%, respectivamente; p = 0,0000001). Las complicaciones en el transcurso de la evoluci ón se comprobaron en 113 de los “No tratados” y en 19 de los “Tratados” (16,9% y 3,5%) siendo esta diferencia estadísticamente significativa (p = 0,0000001). La mortalidad en el transcurso de la evolución se comprobó en 37 de los “No-tratados” y en 7 de los “Tratados” (5,5% y 1,3%) siendo esta diferencia estadísticamente significativa (p = 0,00019). En conclusión, parecería que una mayor precocidad en la instauración del tratamiento antiparasitario aumentaría las posibilidades de que este sea efectivo, así como también las probabilidades de prevenir o disminuir la incidencia de cardiopatía en infectados crónicos o de detener su evolución y disminuir su morbimortalidad en los pacientes con cardiopatía ya instalada.

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2012-08-27   |   300 visitas   |   Evalua este artículo 0 valoraciones

Vol. 30 Núm.2. Abril-Junio 2001 Pags. 289-296 Rev Fed Arg Cardiol 2001; 30(2)